Jose Luis Florez Solis
Con el transcurrir del tiempo nos encontramos cada vez más
con un planeta poco agradable para la naturaleza y muy agradable para los
humanos artificiales, pues hemos llegado a un tiempo donde, lastimosamente, para
muchos el dinero es más valioso que la vida misma.
En la sociedad de la primera ola vemos que la naturaleza
hace parte de la cotidianidad y es prácticamente imposible imaginarse la vida
sin ella pues es desde donde obtenemos nuestros
alimentos, vestidos, vivienda, etc. Pero desde que la masificación de
los excedentes en la producción fue volviéndose más influyentes en la sociedad
se encuentra está en un callejón sin salida hacia la destrucción del ambiente natural,
pues cada vez encontramos más cosas con
las que no es natural encontrarnos o que si lo fuera tendríamos miedo, pero que
ahora son tan normales que sería más raro no verlas.
Si tomamos en cuenta que nuestro planeta tiene una capacidad
de regenerarse de casi 1% por año podemos ver que no hay un equilibrio que
sustente nuestra supervivencia, al menos en este planeta.
Pensando en esto podríamos decir que nuestra sociedad va en
una constante decadencia pues en gran parte de la sociedad global es más
factible extraer recursos no renovables que buscar solución a la extracción de
estos remplazándolos con productos renovables o de nulo daño ambiental ya que
la idea en general es lucrarse sin importar las consecuencias que cause a largo
plazo. Actos como la colonización, que ayudo a la destrucción de miles de
especies de fauna y flora a causa de importar nuevas especies de plantas y
animales superiores o nocivos para los nativos de las zonas afectadas, o como
la extracción de fuentes energéticas de recursos no renovables como los eran el
aceite de ballena o que aún lo vemos en gran cantidad del mundo los derivados
del petróleo y las fuentes de energía nuclear, ayudan que la tercera ola sea
basada en una cosante lucha por saciar la sed de poder. Sin embargo cuando
entramos en la sociedad de la tercera ola entramos a ver ciertos cambios
masivos en todos los aspectos, uno de ellos la concientización del ambiente y encontramos
avances y estudios tecnológicos dedicados a la reducción y/o disminución de la
contaminación en el planeta que han ayudado a que el planeta tenga un poco más
de vida, o mejor a que el planeta pueda albergar un poco más de tiempo la vida.
Para conseguir lo deseado es necesario crear cambio desde
nuestros actos cotidianos y creando una economía más capaz de desempeñar un
papel importante que incluya los aspectos y las consecuencias ambientales.