El dinero, más allá de una realidad imaginada

 Jhoan Sebastián Ramos Quiroz

A lo largo de la historia, surge una gran interrogante, ¿cómo es que la humanidad logró llegar a lo que es ahora?, pasamos de ser animales como cualquier otro, animales sin importancia como plantea Yuval Noah Harari en su obra de animales a dioses; a ser la especie dominante en el planeta, y normalmente cuando se busca tratar de explicar esta cuestión, buscamos la respuesta en el individualismo del ser humano. Tenemos una idea o llegamos a creer que tenemos algo de especial cada uno de nosotros, como lo es por ejemplo que nuestras capacidades físicas e intelectuales son mejores y en su caso únicas en comparación a la de otros animales, lo que nos hace creer que somos superiores y podemos disponer de todo los recursos del planeta en cuanto nos plazca; pero realmente como individuos somos tan similares como cualquier especie del linaje de los simios. lo que hace que la especie humana goce de las instancias donde se encuentra, es su capacidad  de trabajar masivamente en busca de algo particular, que es lo que hace la diferencia de la mayoría de animales, los humanos podemos trabajar de manera flexible en grupos bastante grandes y esto es lo que nos diferencia de un mono cualquiera; pero el interrogante central es cómo surge esta cooperación colectiva, si en la individualidad del ser humano está salvaguardar su supervivencia; pues,  esto es mediante realidades imaginadas que nos permiten convivir y convencer a los demás a que hagan ciertas cosas para poder cooperar y trabajar juntos.

Al ser los únicos animales que ostentamos del uso de un lenguaje y usamos otras herramientas para entender las realidades del mundo físico, podemos ver y tocar, pero además hacemos creaciones de un mundo imaginado, ficción de la que nos basamos para persuadir a la personas de trabajar y cooperar de manera organizada. realidades que nos dicen por ejemplo que hay un dios sobre nuestras cabezas, y, si haces daño o algo indebido a los demás miembros del grupo te castigará. así es entonces cómo se crean las religiones, el dinero, incluso la ciencia, de esta es manera es como todos nos regimos por las mismas reglas y normas, es por esto que bajo estas ficciones los seres humanos controlamos el planeta. La religión, la justicia, la idea de nación, son todas estas realidades imaginadas que hacen que la humanidad trabaje a la par, y de estas la única que es universal y en la que todos creemos es el en dinero.”en abstracto, el dinero se define a menudo como un medio de intercambio, mientras que a nivel concreto el concepto se refiere a esa clase de objetos usados comúnmente para realizar esa función”(Eagleton,williams y adam;1997). Realidad que desde tiempos antiguos se ha venido presentando en numerosas representaciones, monedas de oro, plata, cobre etc y a evolucionado en la actualidad para poder encontrarlos hasta en representaciones virtuales. “los sapiens son animales relativamente débiles, cuya ventaja reside en su capacidad de cooperar en gran número” ( Harari,2014)

En un mundo globalizado por el capitalismo, es adecuado considerarlo como máximo exponente del dinero, y los países que controlan esta realidad imaginada tienen poder sobre el mundo, es aquí donde postulo al dinero más allá de solo una realidad imaginada, este puede ocasionar muchos efectos sobre las relaciones sociales, tanto para bien como para mal, el uso de este y su inequitativa distribución se vuelve cada vez más en un factor de suma importancia a considerar por los capitalistas, es decir, el capitalismo debe replantearse en la manera en que regula y controla esta realidad imaginada. el dinero se ha convertido en una forma de control mediante el uso del capital y por ende el dinero, en un acto que se apoya en la expectativa de ganancia debido al actos de intercambio que facilita el lucro de una manera pacífica y legal. podemos identificar que en la antigüedad la forma de control de las sociedades se centraban en la religión, específicamente el catolicismo , y quienes ostentaban el poder en estas instituciones se encargaban de manejar a las personas a su antojo, quién no cumpliese con las leyes de Dios era castigado; si se tenía una forma de vida diferente a la que biblia mandaba. en este contexto podemos entonces aclarar que el uso el dinero, al igual que las religiones establece la sociedad tal cual es, es cierto que todos somo conscientes que esos trozos de papel no tienen valor en sí mismos, pero en nuestra realidad imaginada colectiva, mientras más papales de estos se posean, más cosas se pueden comprar y por ende se podrá ostentar de un mayor poder, así es pues que todos nos regimos bajo el precepto de tratar de recaudar lo máximo en cuanto sea posible, porque esto nos ayudará de base para poder tener una vida buena o en las condiciones más que óptimas para subsistir y sobrevivir. al darle un valor monetario a las cosas, las convertimos por ende en medidas humanas y es así que el dinero podría ser considerado en cierta medida una religión que controla y regula los colectivos humanos.

el dinero como puente en la actividad económica, transforma las condiciones de vida de la personas, haciendo estas loables o deplorables, en un sistema tan estropeado por la acumulación inequitativa del capital, la posesión de este supone una gran relevancia en la caracterización de las personas; actualmente no se toma a una persona por lo que es sino por lo que posee o pueda comprar. El consumo de los bienes y servicios, resultados de la actividad económica están dirigidos por la capacidad adquisitiva que posean las personas, entre más ingresos se tengan mayor se puede tener y viceversa, muchas personas dentro del sistema capitalista, se encuentran en pobreza extrema, que no suple ni siquiera sus necesidades básicas, es ahí donde el dinero más allá que una realidad imaginada sería de suma importancia en la sobrevivencia de las personas. el dinero siendo símbolo central del sistema capitalista, la representación subjetiva del capital, desata tensiones internacionales entre los países, en una constante competencia entre capitalistas, y en el afán de dirigir y poseer el poder y control sobre el mundo, donde entran en juego también los avances tecnológicos, pues, si se cuenta con la suficiente tecnología mayor incidencia sobre el mundo se puede tener. En contraste se puede aducir que lo que hace al hombre un ser socialmente económico, es la capacidad que tenga en consideración a la posesión del dinero, si este no cuenta con un capital no podrá solventar lo necesario para incrementar sus posibilidades de subsistencia, cabe mencionar que antes de que existiera el dinero se podía sobrevivir, pero en una sociedad capitalista las posibilidades de sobrevivir sin tener acceso al dinero, serían casi nulas; por esto es que la sociabilidad del hombre gira en torno a su sobrevivencia, y la realidad imaginada del dinero, ya pasa a ser no tan subjetiva sino vital.

Referencias 

·  Noah Harari, Yuval. De animales a dioses: una breve historia de la humanidad. Barcelona, Debate, 2013.

Archibald, Marion, et al. Historia Del Dinero. Barcelona, Paidós Ibérica, S.A., 1997.