lunes, 25 de mayo de 2015

Efectos estabilizadores de las políticas fiscales



En tiempos de crisis económica una de las expresiones que más se menciona es la de austeridad. Los agentes económicos se concentran en intentar manejar los recursos monetarios de manera más prudente. Sucede que a un país en estado de recesión se le caen los ingresos tributarios y en esta vía crece el déficit fiscal. Una solución apresurada es imponer subidas impositivas y especialmente, minimizar el gasto público intentando producir un superávit fiscal para evitar la catástrofe, interpretada como un incremento cada vez mayor en la deuda pública. La ilusión es que esa austeridad fiscal posibilite a la nación volver al ritmo de crecimiento económico. Los efectos que generan dichas políticas fiscales contraccionistas en la economía, es decir la forma en que la actividad económica se ve afectada por ellas, se mide a través de lo que se llama multiplicador fiscal.
Hemos podido ver que una de las organizaciones más importantes en materia de Economía y que ha sido una de las principales defensoras e impulsoras de la austeridad, el Fondo Monetario Internacional, ha tenido que admitir el error en sus pronósticos, pues los multiplicadores fiscales han sido mucho más altos que aquellos considerados en los estudios previos, y es evidente que las políticas de austeridad fiscal aplicadas en países europeos no sólo no han cumplido con sus objetivos si no que el recorte generalmente orientado a servicios públicos como educación, sanidad y seguridad continúa cobrándose un elevado coste social.
Por otro lado, en teoría la visión Keynesiana de las recesiones económicas recomienda políticas fiscales y monetarias expansionistas, es decir aumentar el gasto público y bajar las tasas de interés para acelerar el crecimiento, es el caso de países como Estados Unidos o Japón que en los últimos años optaron por implementar políticas fiscales de estímulo o expansionistas para hacer frente al déficit público y parecen haber tenido mejores resultados que aquellos que han limitado demasiado su gasto público con la consolidación fiscal.
Si bien hay economistas como Olivier Blanchard y Daniel Leigh, miembros del FMI, que, aún después de los resultados, se oponen a ver la práctica de austeridad fiscal como indeseable, hay otros como Paul Krugman, premio Nobel de Economía, que recomiendan replantearse totalmente el manejo que se le ha dado a la política fiscal. Lo importante en este punto es entender que no pueden aplicarse medidas generalizadas en casos de crisis, los efectos estabilizadores de las políticas fiscales, ya sean de estímulo o de ajuste, deben valorarse con gran meticulosidad, con un análisis costo/beneficio para cada país en función del instrumento fiscal empleado y las características del estímulo o consolidación: duración del cambio fiscal, aplicación simultánea de otras medidas de política económica, entre otras. Aunque no sea una tarea fácil por la difícil situación de la economía, por la proliferación de los problemas y todas las presiones, el análisis antes de recomendar cualquier ajuste, debe considerar los distintos efectos sobre el crecimiento, sobre la reducción del déficit y de la deuda pública, sobre el bienestar de la ciudadanía, sobre la distribución de los ingresos, sobre las tasas de desempleo y pobreza, etcétera.
Y en el periodo de tiempo mientras se combate un estado de recesión, desde luego hay lugar para la austeridad a nivel microeconómico, sería ideal que la crisis aunada a la responsabilidad y la consciencia ambiental potencie los nuevos ecosistemas de valor ya incipientes en los que prácticas austeras de acceso compartido y la preocupación ecológica dan lugar a la figura de prosumidor. Es tema lo suficiente complejo para un próximo texto paralelo, pero cabe decir que posiblemente este movimiento estaría en capacidad de desarrollar un nuevo modelo económico y social que invierta en las personas, que fortalezca las instituciones democráticas y desarrolle el sistema fiscal justo y progresivo que tanto se necesita.


Andrea Domínguez Muñoz

No hay comentarios.:

Publicar un comentario