Julián
Esteban Camacho
Lo cierto es que los temores sobre el impacto de la
tecnología en el empleo no son precisamente nuevos. El “ludismo” de principios
del siglo XIX dio una buena prueba del rechazo del trabajador hacia la
intromisión de las máquinas en las tareas de producción. Karl Marx, desde el
plano de las ideas, ofrece una explicación de los efectos aparejados a este
fenómeno en su obra “El Capital”, en lo que se ha dado en conocer como la “ley
de la tendencia decreciente de la tasa de ganancia”. Según ésta, si es el esfuerzo
invertido por el trabajador en la producción de una mercancía es lo que
confiere valor a ésta, el trabajo como origen del “valor” a mayor mecanización
del proceso productivo, menor necesidad de mano de obra, y por tanto, menor
valor depositado en la mercancía. (Marx)
Lo que algunos creen es que el rápido cambio
tecnológico viene destruyendo empleos más rápidamente de lo que los crea,
contribuyendo así al estancamiento del ingreso medio y al crecimiento de la
desigualdad en Estados Unidos y otros países tecnológicamente avanzados.
Pero lo cierto
de la tecnología es que permite que el humano se centre en trabajos que se
adaptan mucho mejor a sus virtudes y es difícil negar que la calidad de vida y de
trabajo es mejor hoy que en los tiempos antiguos y eso que hoy las condiciones
laborales no pasan por su mejor momento, y hay muchos trabajos un ejemplo de
esto podrían ser los desarrolladores de aplicaciones tanto para Smartphone como
para los computadores. Debemos de darle tiempo a nuestra sociedad para que se
acostumbre a estos grandes cambios, se trata simplemente de adaptarse a los
cambios, y si algo ha demostrado el ser humano es una gran capacidad de
adaptación. (Sophimania)
A medida que
la tecnología vaya avanzando creará
empleos pero no serán a los que estamos acostumbrados, si algunos puestos de
trabajos están siendo sustituidos por tecnología solo hay que pensar que
esa tecnología necesita ser desarrollada, mantenida o manejada. Ahí están las
nuevas posibilidades de trabajo o puestos de trabajo. Es una cuestión de
adaptación. Si podría llegar a destruir los empleos clásicos como el montaje de coches que
prácticamente está ya automatizado. Los nuevos trabajos estarán más orientados
hacia la creatividad, mantenimiento de sistemas, informática, programación,
etc. También se mantendrá la mano de obra en construcción, transporte,
agricultura, etc.
Aunque la gente se
vaya acogiendo a estos avances, seguirá habiendo una cantidad inmensa de gente que cree que el progreso tecnológico
destruye las posibilidades de conseguir empleo mas fácilmente. Esto es así
porque para algunas de estas personas les resulta fácil percibir que en
determinados sectores económicos la instalación de máquinas o robots supone que
automáticamente sean despedidos una gran parte de la mano de obra humana en las
empresas.
Existe una batalla
histórica desde hace tiempo entre los seres humanos y la maquinas, las
preguntas más frecuentes que se presentan en esta problemática pueden ser: ¿Son las máquinas
las culpables de usurpar nuestros trabajos? ¿O son simples avances que alivian
nuestra carga de trabajo? En un estudio realizado por algunos economistas de la
consultora Deloitte, dan una conclusión muy contraria a lo que las demás
personas piensan: en lugar de destruir puestos de trabajo, la tecnología ha
sido una “gran máquina generadora de empleo”, la tecnología ha aumentado el
poder adquisitivo de las personas y, por lo tanto, la creación de una
nueva demanda y nuevos puestos de trabajo. (Deloitte)
Concluyendo con
esto la tecnología siempre ha reflejado el deseo del hombre de hacer la
vida más fácil. Así, nos libera de realizar tareas que no nos gustan, y nos
fuerza a enfocarnos en las nuevas demandas de los consumidores. Por los últimos
años de historia, además, ha sido creadora neta de empleo, y no hay motivos
teóricos que nos hagan pensar que esta tendencia va a empezar a cambiar justo
ahora. Más que temerle, a la tecnología hay que agradecerle. Si no fuera por
ella, estaríamos todavía trabajando la tierra.
Bibliografía
Deloitte. (s.f.). Obtenido de Deloitte:
https://www2.deloitte.com/co/es/pages/consultoria/topic/technology.html?icid=top_technology
Marx, K. (s.f.).
Obtenido de
http://aristobulo.psuv.org.ve/wp-content/uploads/2008/10/marx-karl-el-capital-tomo-i1.pdf
Sophimania. (s.f.). SophiMania.
Obtenido de SophiMania:
http://www.sophimania.pe/tecnologia/redes-sociales/la-tecnologia-ha-creado-mas-puestos-de-trabajo-de-los-que-ha-destruido/
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ResponderBorrarAún no sé si considerar los avances tecnológicos como algo positivo o como algo negativo, pues por una parte está la forma en que la tecnología apoya y facilita las labores que desempeña el hombre y por esa misma parte, esta el hecho de que al facilitar esas labores esta reemplazando al ser humano. Son diversos los puntos a favor y en contra de los avances tecnológicos se destacan hechos de gran magnitud como los avances en la ciencia, la medicina, los viajes al espacio, etc. pero el hecho de que la tecnología reemplace al hombre en labores cotidianas quizá y desde mi punto de vista no resulte muy productivo.
ResponderBorrarconcuerdo con lo que plantea el autor, en mi opinión estas nuevas tecnologías nos producen un cambio en cuanto a lo que se refiere a empleo solo hay que buscar la forma de adaptarse a las nuevas formas de trabajo, desde mi punto de vista las tecnologías pueden hacer que muchas personas pierdan su trabajo pero al mismo tiempo estas nuevas tecnologías crean otros empleos, lo importante es adaptarse a las nuevas necesidades que nos plantea la sociedad.
ResponderBorrarEstoy de acuerdo al autor en en lo que refiere a que una maquina no puede reemplazar al ser humano en cuanto a creatividad y el pensamiento racional. Agregaría(Irónicamente) que la maquina flexibilizo un poco el montaje en cadena típico de la industrialización en sus épocas mas notoria, un ejemplo de esto puede verse en el montaje de coches que ya esta prácticamente automatizado como lo planteas en el texto.
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