Astrith
Carolina Alba Monje
¿Cómo la violencia sexual contra las mujeres dentro del
marco del conflicto armado en Colombia ha sido empleada como mecanismo de
intimidación directa ejercida por grupos armados legales e ilegales?
“…todas las formas de violencia
contra las mujeres no deberían considerarse como una aberración, sino como una
prolongación de un continuo de creencias que otorgan al hombre el derecho de
controlar el cuerpo, la conducta y la vida de las mujeres”.
(L. Heise. OPS)
Dentro del sistema socio-sexual patriarcal,
las mujeres están expuestas desde la infancia a la violencia, siendo el hecho
de pertenecer al sexo femenino el factor de riesgo. La violencia sexual perpetrada
contra las mujeres en el marco del conflicto armado son experiencias propias del
cuerpo sexuado, es decir son los cuerpos de los combatientes quienes ejercen
poder sobre los cuerpos de las mujeres, y son los cuerpos de las mujeres quienes
son humillados, violentados y ultrajados con la intensión de generar pánico y
control en la población. Para Clara Elena Cardona, de la Casa de la Mujer, la violencia sexual se fundamenta en una
cultura patriarcal, determinada para que los varones tengan el poder y las
mujeres queden supeditadas a ellos. En el conflicto armado se profundiza la
discriminación. A través del cuerpo de las mujeres hay retaliación o venganza
hacia el enemigo: son premios de guerra.
Entre las distintas formas de violencia
sexual empleadas por los actores armados en Colombia se identifican principalmente,
la violación, el abuso y el acoso sexual, desnudez forzada, prostitución
forzada, esclavitud sexual y mutilaciones; además, imposición de control de
natalidad a mujeres indígenas, afrocolombianas y combatientes – aborto, uso de
anticonceptivos y esterilización forzada–. “La violencia sexual contra las mujeres es
una práctica utilizada por todos los actores armados –incluida la fuerza
pública– que lesiona la integridad de las mujeres y constituye una grave
vulneración de sus derechos”. (Amnistía Internacional, Colombia, 2004)
A pesar del panorama son pocos los casos
de este tipo que han sido denunciados, entre los factores están especialmente limitaciones
como “el no reconocimiento de las mujeres como sujetos de derechos y como
víctimas; la desconfianza frente a las instituciones estatales; el temor a la
estigmatización y la re-victimización; la naturalización de las violencias; el
miedo y el silencio; el desconocimiento de las instituciones responsables para
la protección, la prevención, la atención, la investigación y la sanción de las
violencias, y de los mecanismos para la exigibilidad de su derecho a una vida
libre de violencias”.(Mesa de Trabajo Mujer y Conflicto Armado, 2009, p. 34).
Tal situación contribuye a que no haya cifras sobre abuso sexual a causa del
conflicto armado, las cifras existentes reflejan la situación en otros
contextos y, sin embargo, presentan un subregistro por miedo a denunciar.
Finalmente, es pertinente resaltar que los
cuerpos de las mujeres no son espacios para el ejercicio de la violencia, por
el contrario son cuerpos de sujetas políticas, que resisten, exigen y buscan reivindicar
su derecho a vivir una vida libre de violencia. La erradicación de la violencia
sexual en Colombia implicaría poner fin a la implementación de políticas de
Estado que han contribuido a la comisión de este crimen junto a la abolición de
prácticas discriminatorias por parte de agentes del Estado y superación de la
impunidad con el fin de garantizar el derecho de las mujeres a vivir una vida sin
violencia ni militarización de sus vidas.
Referencias
Bibliográficas.
·
Sánchez, G. Olga. (2008). Las violencias
contra las mujeres en una sociedad en guerra Bogotá: Ruta Pacífica de las
Mujeres.
·
Mesa de Trabajo Mujer y Conflicto Armado.
(2008). VIII Informe sobre violencia sociopolítica contra mujeres, jóvenes y
niñas en Colombia Bogotá: Ediciones Ántropos.
·
Organización De Los Estados Americanos
Comisión Interamericana De Derechos Humanos. (2006). Las Mujeres Frente A La
Violencia Y La Discriminación Derivadas Del Conflicto Armado En Colombia.
Washington, D.C.
·
Mesa de Trabajo Mujer y Conflicto Armado.
(2009). IX Informe Sobre Violencia Sociopolítica Contra Mujeres, Jóvenes Y
Niñas En Colombia Bogotá: Ediciones Ántropos.
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