LA UNIVERSIDAD DEBE SER UN ACTOR POLITICO.

Yeferson Pulgarin Pardo.

La universidad como un escenario académico de disputa y debate del conocimiento debe abrir y debatir sobre la política del país. Así mismo fortalecer la democracia y las interacciones entre el estado, las instituciones y la sociedad civil, así como defender los procesos y los mecanismos de participación. Pero llegar a estos escenarios de discusión y propuestas políticas no es fácil pues se necesita de unas instituciones que reflexionen pública e incansablemente sobre qué significa crear condiciones de equidad, justicia y de dignidad para toda la ciudadanía.

Que las universidades tengan o no un enfoque, necesariamente deben tener una posición política y un compromiso con el desarrollo del país. Que la Universidad se perfile como un actor político no significa que funde un partido o apoye a X o Y candidato en unas elecciones, sino que ejerza desde la academia su función de deliberar y exigir mejores redistribuciones del poder, y proponga decisiones más equitativas y justas para la sociedad.

La universidad como una figura activa de esta sociedad debe posicionarse como un actor político, que dialogue con el estado sus instituciones y gobernantes que aporte a las políticas sociales y públicas y proponga formas nuevas de comprender lo social, lo cultural y económico, que diseñe, ponga en marcha y evalúe modelos de desarrollo a nivel local, regional y nacional que busquen crear condiciones de vida digna. La universidad como institución académica debe hacerle resistencia a aquellas miradas que subordinan lo social, lo educativo y lo político a las lógicas de mercado.

¿Y cómo estamos nosotros?

Es importante tener en cuenta el papel de la universidad y de los estudiantes. La universidad del Cauca contiene un potencial importante a tener en cuenta. Por un lado, se encuentra en la gente, los estudiantes, y por otro el papel de opinión publica que genera.

¿Cuántos estudiantes hay en la universidad? Aproximadamente 17 mil. Algunos de otros departamentos y municipios, que se vinculan en la dinámica económica, social y política de la ciudad.  En la mayoría de los casos no porque quieran, si no por que toca. Muchos pagan arriendo, pagan tiqueteras o comen en los restaurantes de la ciudad. Sin contar con la inversión en servicios de transporte, agua, energía, internet, fotocopias, juegos y diversiones varias. Ósea los estudiantes mantienen una considerable transacción de dinero=servicios.

Y no es poco. Popayán, mantiene la mayor parte su actividad económica a partir de los servicios, o de lo que se llama la economía terciaria. Ya que los otros dos sectores de la economía, la primaria o extracción de recursos naturales, y la segunda o la producción industrial, no se consolida aun en la ciudad. Es de ahí la importancia de la actividad que crea la Universidad del Cauca en el ámbito económico y social. ¿Y en el político? En la política local es bien sabido del fortín de burocracia y clientelismo que esta genera para las elites tradicionales de la ciudad y del departamento, siendo empresa de favores de los rectores de turno.

Pero en el caso de la incidencia de los estudiantes en la política de la ciudad al parecer es nula. Son pocas las reacciones de los estudiantes ante las decisiones gubernamentales que perjudican la vida en la ciudad, como el caso de la movilidad, los servicios, las políticas de seguridad, de cultura, de empleo, etc. O es poco el interés de los estudiantes en poder desarrollar su profesión y estudio en las comunidades o barrios marginales, no como pasar el rato de la universidad, sino en proyección a construir una ciudad diferente.

Tampoco es sentido los desfalcos económicos y los robos de los gobernantes, la pobreza, la brutalidad policial, los desalojamientos violentos a comunidades desplazadas, etc. Al menos desde la mayoría de los estudiantes.

Bien, esta es la ciudad, sus problemáticas y como la Universidad responde, en este caso desde los estudiantes. Hemos dicho que es nula y desconocida su participación.

Pero que aun así la universidad cumple un papel protagónico en la vida de la ciudad Universitaria de Colombia. Ciudad universitaria en la que no solo tiene incidencia la universidad del Cauca si no también otras, algunas de estas tienen la característica de presentarse como sedes de universidades públicas regionales, como el caso de la Universidad del Tolima, las demás mantienen su dinámica de funcionamiento desde el carácter privado, como la FUP, UNICONFACAUCA, La Universidad Antonio Nariño, Universidad Cooperativa de Colombia, la Universidad Autónoma, que se encuentran inscritas como universidades. Lo demás que existe en la ciudad son un sin número de institutos universitarios de carácter privado que muchas veces desconocemos.

Pero todas con una característica casi común, la mayoría son estudiantes provenientes de la ciudad, o de algún municipio cercano. Esto lo digo teniendo en cuenta el valor de la matrícula que no es menor a un millón de pesos, o el financiamiento a través de becas. Además, tengamos en cuenta otra realidad. ¿Quién ingresa a la universidad del cauca? y ¿Quién ingresa a la universidad privada? Al parecer la universidad pública se la está tomando en un mayor porcentaje los estudiantes provenientes de los colegios privados, con un nivel mayor de ingresos y con mejor preparación en términos de las pruebas.

Que pasa entonces con los estudiantes de los colegios públicos, muchos de escasos recursos y que viven en los barrios populares y marginales de la ciudad. Un número de ellos está en Unicauca, otros llenan las filas de mano de obra barata, y otros endeudados pagando su educación en la universidad privada o en los institutos de educación superior, al no haber ingresado en la universidad pública.

Es por todo esto que como estudiantes de primer semestre no podemos ser ajenos a las discusiones que se presentan en nuestra universidad antes debemos propiciar estos escenarios de discusión, pues la universidad del Cauca contiene un potencial importante a tener en cuenta en el desarrollo de la ciudad, el departamento y la región.