El
grupo yihadista Estado islámico (Isis) ha acaparado la atención por las
masacres, los secuestros masivos, el amplio uso de la violencia sexual y la
decapitación de rehenes occidentales, entre otras prácticas, que han alimentado
su fama de organización salvaje y brutal.
La
organización ha desplegado una serie de estrategias para ganar posiciones y
consolidar el control de territorios (han aprovechado las crisis en países como
Siria) aumentando su poder político y económico. En las zonas que están total o
parcialmente bajo su control, ISIS que se considera representante y líder de los
“verdaderos creyentes” ha aprovechado la vulnerabilidad de las personas
respecto a “en que se debe creer” y ha impuesto restricciones y limitaciones a
las mujeres en espacios públicos, utilizando castigos severos a quienes
desafíen sus normas, sus prácticas salvajes contra la población han motivado el
desplazamiento forzado de miles de personas.
ISIS
ha buscado auto-sustentarse y ha orientado sus esfuerzos a explotar pozos y
refinerías de petróleo y gas, la mayor parte de sus recursos proceden de la
venta de petróleo y gas en el mercado negro, también han mostrado que tienen un
buen manejo de las tecnologías puesto que mediante el uso de internet y redes
sociales, han difundido propaganda para atraer nuevos seguidores a su “reino
del terror”, pero no solo para esto si no también lo han usado para enviar
amenazas a diferentes gobiernos y la publicación de decapitaciones de personas
occidentales.
La
estrategia de combate contra ISIS ha privilegiado la vía militar, sin embargo
incluso aquellos que están a favor del
uso de armas contra este grupo terrorista han reconocido que no es
probable que los bombardeos y las armas resuelvan el problema, ya que proveer
de armas a los actores locales para que defiendan su comunidad también crea una situación delicada.
Declarar
la guerra al grupo yihadista supone concederle un triunfo propagandístico de consecuencias
difíciles de prevenir, las personas que disparan con fusiles de asalto contra
civiles en un restaurante o una sala de conciertos no son adversarios ni
protagonistas de ninguna guerra, son asesinos que deben ser perseguidos y
detenidos, lanzar una guerra contra ISIS es inútil si no se asume que es un
enfrentamiento de bases ideológicas que cada día se fortalecen más con cada uno
de sus seguidores nuevos y los anima a seguir con sus sanguinarias prácticas, de
lo contrario, acabar con ellos será sólo una etapa más en una guerra
interminable.
Es
impresionante como en nombre de una religión se pueden cometer tantos delitos,
este grupo se mueve bajo el pensamiento de que “el islam” es la única religión
correcta y que los que creen en cosas diferentes son impuros y merecen morir,
muchos jóvenes se unen tan solo porque este grupo va en contra del Estado y eso
es lo que ellos buscan, sin embargo y sin quererlo realmente, se sumergen en un
mundo lleno de atrocidades justificadas en el nombre de Alá.
No
solo es ISIS, son muchos más grupos que atentan contra la vida de civiles, buscando
ampliación de territorio, poder económico y político y pasando por encima de lo
que sea, vida humana, vida animal y la naturaleza, grupos que ocasionan pobreza
y desplazamiento, grupos que acaban con la vida de millones de personas.
La tercera ola presenta una perspectiva completamente
distinta. Sostiene que el mundo no se ha perdido en la locura y que, de hecho,
bajo el desorden y el alboroto de acontecimientos aparentemente desprovistos de
sentido, hay un sorprendente modelo, lleno de esperanza. Espero que a pesar de
ver todo lo que el ser humano puede ocasionar como los ataques terroristas,
podamos llegar a la tan esperada civilización de la tercera ola aunque sea tan
solo una utopía.
Buena Noche. Me fue interesante tu texto, se supone que las religiones son instituciones donde los individuos purifican el espíritu para generar un bienestar colectivo, pero ¿Pero por qué sus actos no concuerdan con lo que definen?, y lo digo por los yihadistas que han hecho una guerra de creencias simplemente por diversos intereses particulares. Este grupo son seres que cada día involucionan, y me parece increíble que después de todos los genocidios que ha ocasionado en todo el mundo tenga seguidores.
ResponderBorrarEllos quiere lograr lo mismo del capitalismo, hacer dominio de todo, solo que de una manera mas drástica, quieren que las personas se adapten a una sola idea, una sola creencia, donde si no haces lo que ellos impongan como regla pagaran con sus vidas.
Este mundo por estas razones esta cada vez de mal en peor.
Por otro lado, concuerdo con que no se puede acabar guerra con guerra, ésta solo se acabara si y solo si, esta gente entienda que no es sano lo que hacen, con el daño que le han hecho a la sociedad con sus actos terroristas porque han acabado con la vida de muchas personas. Cuando ésto suceda esperaremos lo que mencionas tú "el modelo de la esperanza para un mundo mejor".
Buen dia. si bien es cierto que el accionar de Isis es reprochable en toda medida, a mi parecer el más grande pecado es hacer tambalear a Occidente y tener miedo. si comparamos a Isis y a el Catolisismo, encontraremos mas cosas en común que diferencias, quemaron gente viva en la inquisición, desplazaron y aplastaron al naciones enteras en las cruzadas, ampararon genocidios como el de la Alemania nazi o las dictaduras latiamericanas y su mezcla con el poder politico sigue tan presente como en la antiguedad, ejemplo de ello es el cargo del procurador en nuestro país que defiende a acendados y condena a pensadores. Aún así cargamos sus santos y en plazas erigimos templos para su alabanza, nos ufanamos de celebrar la Semana Santa, perpetuando y elevando su poder sobre nuestros pobres pueblos que endebles siguen su credo.
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